20 de mayo de 2010

Desde el fin del mundo

Lo curioso de Islandia es que cuando uno cree que ya ha alcanzado el punto de saturacion de tanto paisaje imposible, cuando uno piensa que los proximos treinta kilometros hay que hacerlos de un tiron, cuando uno deberia empezar a aburrirse de tanta naturaleza salvaje... entonces llega la siguiente curva y uno no puede decir otra cosa que "ooohhhhhh, patxi la hostia, esto no lo tenemos en Bilbao" y pararse en mitad de la carretera y hacer fotos compulsivamente y preguntarse quien sera el guapo que se trague la coleccion completa de fotos de estepas, volcanes, acantilados y otros accidentes geograficos islandeses.

Lo curioso de Islandia es que cuando uno va por un camino de ovejas, desafiando las leyes de la logica, con un Opel Corsa, en segunda, y se pregunta si la cosa puede ir a peor, entonces ocurre, si, el camino se vuelve camino de cabras y uno se pregunta si debe meter la primera o mandar a tomar por culo el coche y empezar a andar.

Pero al final el resultado merece la pena, y despues del camino de ratas, esta el fin del mundo, y hay una granja en una playa de arena blanquisima y un mar turquesa. Aqui termina Europa, mas al oeste solo quedan mares, dragones y abismos.

Y ahora me vais a disculpar, tengo que atravesar unos cuantos fiordos para llegar de nuevo a la civilización, en la costa norte de los fiordos. Dice la lonely planet que hasta hay una ciudad con más de un restaurante y todo.

(perdon por los acentos, pero en este teclado solo cosas como æ ð Ð Æ þ Þ. Y si el formato del blog esta un poco manga por hombre y parece que las fotos no llegan... pero es lo que tiene estar en el fin del mundo).

Las postales del tío Matt: rumbo norte

Lunes, 17 de Mayo de 2010

Querido sobrino Gobo,

Una de las criaturas del mundo exterior ha accedido a llevarme en su máquina de ruedas a Snæfellsjökull. A juzgar por su atuendo no pertenece a IslandiaRock aunque desde que consiguió comprar la cuerda que conecta la caja de guardar música a la máquina de ruedas me tiene mareado con las melodías de un tal Sigur Rós que parece ser de este extraño lugar.

Antes del viaje aún tuve tiempo de seguir observando a los habitantes de IslandiaRock. He conseguido descubrir el secreto de sus atuendos desfasados. Existe un mercado de segunda mano junto donde los
islandeses llevan generaciones intercambiandose las ropas. Cuanto bien haría aquí Amancio Prada Ortega ¿te acuerdas cuándo abrieron el primer Zara en Fragelrock?

También he descubierto que las criaturas del mundo exterior parecen insensibles al frío. Aprovechando el sol fui a uno de esos lagos rectangulares descubiertos de agua calentita y parecía un día de verano en fragelrock: fragelinas tomando el sol en biquini, curries correteando en bañador de un lado a otro... todo parecía normal
salvo por el termómetro: 7 grados!

El camino hacia Snæfellsjökull pasa al lado de un viejo volcán llamado Eldberg. Conseguí convencer a la criatura del mundo exterior para acercarnos. Tras parar en una granja cercana una nativa nos indicó por señas el camino. Y allá fuimos cruzando campos de lava y riachuelos. Para mi desgracia en la granja habitaba uno de esos monstruos peludos a los que tanto pánico tenemos los fragel. Sin embargo ete pareció ser inofensivo y nos acompaño hasta el mismo cráter y vuelta. Te mando una foto de mi nuevo amigo al que decidí llamar Rós y con el que caminé durante casi dos horas.

Y mañana, si todo va bien, llegaré a Snæfellsjökull y de ahí al centro de fraguelrock. Guardadme un par de curry rascacielos para cenar.

Un abrazo de tu tío Matt

PD. Disculpa las faltas de ortografía, los iphones y su corrector ortográfico no están pensados para estas parrafadas (ni para webs con flash). Han llegado ya los ipad a fragelrock o debería llevarme uno de aquí?

18 de mayo de 2010

Las postales del tío Matt: Reykjavik

Sábado, 16 de Mayo de 2010

Querido Sobrino Gobo,

Mis exploraciones del mundo exterior me han llevado, tras luchar contra volcanes y nubes de polvo, a IslandiaRock. Aquí dicen que en la cumbre del Snæfellsjökull hay una entrada que lleva al mismísimo centro de Fragelrock.

Tras llegar a esta nueva tierra unos simpáticos habitantes del mundo exterior me llevaron hasta el Blue Lagoon, un lugar mágico donde el agua caliente brota del suelo. Los seres del mundo exterior tienen
extrañas costumbres: se bañan en aguas hirviendo mientras se untan la cara de barro.

Tras esta primera experiencia me dirigí a la capital de islandiarock: Reykjavik. Reykjavik es el típico pueblo de pescadores con sus gaviotas, sus casas de chapa, su puerto y sus bares para marineros que llevan 20 años en el barco y acaban de volver a tierra a juzgar por sus atuendos.

Los seres islandeses son magos y tienen un oscuro pacto con el Sol para que no desaparezca hasta bien entrada la noche. Y en lugar de aprovehar tanta luz como buenos curries, los islandeses se parecen a los Fragel, se levantan tarde y esperan y esperan en los bares hasta que finalmente decide hacerse de noche. Esto a hecho que me sea muy fácil adaptarme a su ritmo de vida para poder observarlos en detalle.

Debo partir ahora hacia Snæfellsjökull, prometo volver a escribir lo antes posible.

Un abrazo de tu tío Matt.

Los formales y el frío

Quién iba a prever viejo,
que acabaríamos juntos en esta tierra olvidada
entre tu América y mi Europa,
sobre nuestro Atlántico.
Tu con tus formales y su frío metafísico
y yo con el mío, más mundano, de los tres grados sobre cero.
Bon jour, bon giorno, guten morgen,
soledades, tristezas
el olvido está lleno de memoria
precipicios y fornicios y viceversa.
Resumiendo tanta boludez, tanta palabra,
para dejarnos sin táctica ni estrategia
apoyados en un árbol en el Jardín Botánico
sin más que una triste colección de poemas, edición de bolsillo,
que intuyo no será suficiente
para tantas menganas de pies hermosos que quedan por visitarnos.
Te salvaste, tu bien sabes que te salvaste
y aunque a estos últimos trescientos sesenta y cinco días
les faltaron tus poemas, y tus haikus,
He prometido no guardar rencor
como mucho un poco de nostalgia
tres recuerdos
una ausencia.

14 de mayo de 2010

No me llames iluso...

...porque tenga una ilusión
Si la ceniza es caprichosa
el volcán es ciego
y con el humo
me ha tocao el cupón.




Eyjafjallajokull 1 - Nacho 0. Estos volcanes ya no respetan nada. Resumiendo, vuelo cancelado y billete para mañana. Si el señorito quiere, claro está. Así que esta tarde no veré la puesta de Sol desde el Blue Lagoon.

Ceci n'est pas une blog


Llevaba meses (¿años?) queriendo empezar algo nuevo. No se muy bien lo que saldrá de aquí. Tal vez no sea un blog, aunque tal vez lo parecerá. Puede que con el tiempo se vuelva más un fotolog, sin apenas texto. O viceversa.

Aunque todo está un poco manga por hombro había que aprovechar el tirón ahora que voy a tener algo que contar durante las próximas semanas en Islandia. Ya habrá tiempo después de ir mejorando el diseño y reorientando los contenido. Por el momento esto empieza como un blog de viajes.

Y con esta parrafada, queda inaugurado este pantano.